domingo, 19 de octubre de 2008

Country couture: el estilo Nudie


Buenas.  Bienvenidos al Auditorio Ryman de nuevo (perdón por haberles hecho esperar tantísimo tiempo).  Antes de empezar, me gustaría agradecerle a Porerror, conductor del blog (de calidad) Estatuas Verdes, el haberme recordado lo entretenido y curioso que podía llegar a resultar el tema de hoy.  Después de todo, los trajes Nudie (en inglés, “Nudie suits”) bien podían haber formado parte del “universo Estatuas Verdes”.

Dicho esto, comenzaré con una afirmación casi innegable: los trajes Nudie son “lo máximo” en lo que a ropa se refiere dentro del mundo del Country. Todo “donalguien” ha llevado un traje Nudie propio (y exclusivo): si no, atiendan; ahí tienen ustedes a Hank Williams, George Jones, Ricky Nelson, Johnny Cash, Porter Wagoner, Michael Nesmith, Glen Campbell, Jim Lauderdale y un largísimo etcétera. La verdad es que resulta difícil pensar en los artistas más emblemáticos del Country y no visualizarlos enfundados en sus trajes Nudie.

Todo este “fashionismo” empezó cuando a Nudie Cohn (un sastre emigrado de Rusia a E.E.U.U. a mediados de los años 30) se le ocurrió la brillante idea de decorar con incrustaciones de bisutería los trajes de vestir que los “cowboy dandies” de la Costa Oeste le encargaban, añadiéndoles bordados pomposos y coloristas a más no poder.

Detalle del traje de Hank Snow

Lo crean o no, la repercusión de los diseños fue extraordinaria. Salir al escenario con un traje de Nudie era algo tan “cool” que no muchos pudieron resistirse. Tex Williams y su banda (los Western Caravan) fueron los primeros en llevarlos en público.

El Señor Nudie pasó entonces de tener una tiendita modesta en North Hollywood a recibir aluviones de encargos de los artistas más variopintos (entre sus clientes se encuentran Ronald Reagan, Cher, Michael Landon, Elton John, etc.). Sin embargo… ¿Saben cuál es el traje más famoso de Nudie Cohn? Quizás recuerden el traje de oro de Elvis. Ése que aparece en la portada del disco 50,000,000 Elvis Fans Can’t Be Wrong: Elvis’ Golden Records, Vol. 2 (1959). Pues bien, el propio Nudie lo cosió para El Rey (10.000 dólares le costó la broma), lo que le garantizó pan para comer hasta el día de su muerte.

Bien pasados los años 50, cuando el Country-rock cogía fuerza, Nudie contaba ya con una reputación inmejorable. Por entonces, su yerno, Manuel Cuevas, que se había convertido en su mano derecha, se encargaba de diseñar los trajes de la nueva ola de jóvenes artistas. Se dice que los trajes de los Beatles en la portada del Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (1967) son suyos (no me atrevería a afirmarlo porque no he encontrado referencias demasiado fiables). En fin, mientras... Nudie se dedicaba a pasearse con las estrellas, “tunear” sus coches, tocar la mandolina y engalanar caballos.


Nudie Cohn con Emmylou Harris, Dolly Parton y Sylvester Stallone

Uno de los jóvenes de esta nueva hornada fue Gram Parsons, quien, en su afán por incorporar lo tradicional y lo clásico a los tiempos que corrían, decidió caracterizar a los Flying Burrito Brothers con trajes Nudie. La gracia de la ocurrencia era, no obstante, que los bordados representaran elementos destacables en sus vidas. Así nació el famoso traje Nudie de Gram Parsons: drogas, hojas de marihuana, mujeres desnudas y… una gran Cruz en la espalda. En el documental Gram Parsons: Fallen Angel (Gandulf Henning, 2004), se puede ver a Manuel Cuevas afirmando lo siguiente (atentos): What he was transferring to me in the form of ideas for making the suit, was the actual way that he wanted to die: from the flames to the Cross to the marijuana to the pills and to the girls. Ahí queda eso.

Nudie Cohn murió en toda la cima del éxito en 1984. Sus trajes nunca han llegado a caer en desuso. Tras su muerte, Manuel Cuevas, ya divorciado de la hija de Nudie, trasladó su propio negocio (Manuel’s Exclusive Clothier) a Nashville (Tennessee). Hoy día, los trajes Nudie que se ven (el nombre ya sólo representa el estilo) son suyos.

Jeff Tweedy, de Wilco, con un traje de Nudie

Con medio post ya escrito, el fin de semana pasado, en una pequeña librería de Charing Cross Road, en Londres, descubrí, casualmente… ¡un libro sobre Nudie!: “Are you a fashion designer?”, me preguntó el dependiente, burlón, al pagarlo. Muchos pensarán que los trajes Nudie son lo más hortera del mundo (es debatible), pero lo que resulta incuestionable es que su éxito es, claramente, arrollador. Como ya dijera Glen Campbell allá por los 70 (y David Hasselhoff en los 90), “I’m gonna be where the lights are shinin’ on me / Like a rhinestone cowboy / Riding out on a horse in a star-spangled rodeo / Like a rhinestone cowboy”.